martes, octubre 25, 2005

los cartelitos escritos a mano en las farolas

Si desde el principio o en un momento dado te olvidas de las agencias inmobiliarias para encontrar tu piso, la búsqueda de ofertas (buenas) hechas por particulares no suele ser sencilla, aunque tampoco es misión imposible.

Una de las posibles fuentes de información serían esos cartelitos tan monos, escritos a mano o al menos con tipografía que lo imita, que se encuentran pegados por las farolas, semáforos, buzones de correos, etc. en los que se supone que un particular vende piso.

Normalmente los precios de los particulares no suelen ser tan provechosos como se podría esperar por la falta de intermediario, si acaso te ahorras la comisión de la agencia, pero poco más. No obstante, esta comisión ya es lo suficientemente importante como para intentar explotar esta vía, y por eso llega un momento en que estás a la caza de papelitos de estos aunque hayas salido para despejarte un poco del tema de los pisos.

Habitualmente están redactados como si se tratara de un particular, se da un teléfono y un nombre de contacto, nada de nombre de agencias, ni pistas que puedan apuntar hacia esa dirección, parece que sea una persona que quiere vender su piso.

Pues bueno, particularmente mi experiencia es que todos los anuncios de este tipo que seleccionamos y posteriormente llamamos a preguntar, resultaron ser de agencias y creo intuir que de pisos dificilmente vendibles por una u otra razón, así que el consejo es no confiarse demasiado con que se pueden encontrar fácilmente particulares por esta vía, ya que el porcentaje, si miro mi estadística particular, ha de ser por fuerza bastante bajo.